Entrega de los Globos de Oro

Con la entrega de los globos de oro, otorgados por la prensa extranjera especializada en cine y televisión, se dio inicio a lo que se podría considerar como la temporada máxima de la industria cinematográfica, puesto que durante estos dos meses (enero y febrero), vendrá una maratón de alfombras rojas, trajes y vestidos elegantes, reconociendo los méritos de todos aquellos que hacen posible que podamos ver en la gran pantalla, nuestros más grandiosos sueños hechos realidad.
Vale la pena decir que durante esta época, también se reconocerá lo más nefasto de la industria cinematográfica, que como era de esperar, tiene a la segunda parte de amanecer, el epílogo de la saga de Crepúsculo, como su máximo protagonista, tal como lo consideraron los premios razzie, quienes años tras año, nos recuerdan que en el cine no todo es bonito o majestuoso, también hay quienes por el afán de obtener ganancias sin observar la calidad del producto, terminan dando como resultado películas tan mediocres como la ya mencionada, que en mi opinión, sólo dejó una generación de espectadores descerebrados y una sensación de que al darle a los jóvenes productos fácilmente digeribles y que además encuentran apoyo en medios, se puede encontrar una mina de oro, bastante redituable para los productores, pero supremamente dañina para el futuro del buen cine, que con tristeza muestra que en salas especializadas, donde se exhibe lo mejor de la filmografía mundial, el público brilla por su ausencia.
Entrando en materia, voy a referirme a los más importante y sorpredente de la noche, sin entrar en detalles de moda o cosas por el estilo, pues este es un blog de cine y no de moda. En primer lugar, las películas ganadoras. Argo y Los miserables. Vale la pena decir que si bien Ben Affleck era uno de mis favoritos en secreto, nunca pensé que pudiera vencer a tres monstruos de la dirección como lo son Ang Lee, Quentin Tarantino y Steven Spielberg, aunque al observar las películas nominadas, sentí que esa podía ser la noche de Affleck, pues como lo dije en entradas anteriores, Argo es una gran producción, con todos los ingredientes para hacerse un clásico instantáneo del séptimo arte, una historia que captura al espectador de principio a fin, mezclando dos campos que históricamente han sido tan afines como lo son la política y el cine, mostrando con gran vrtuosismo uno de los eventos más relevantes en la historia diplomática estadounidense, sin caer en melodramas innecesarios o en relatos exegéticos que terminaran aburriendo al espectador.

Lincoln, que arrancaba como favorita y Una aventura extraordinaria que la seguía en nominaciones, si bien contaban con gran calidad en su cinematografía y en sus actuaciones, nunca dejaron de ser relatos con altibajos, que en ocasiones llegaban al corazón del espectador, pero que debido a sus interminables diálogos y a tramas que no terminan de cerrarse en el transcurso de la película, pasan a ser documentos fílmicos importantes, pero no relevantes.
En cuanto a las películas del género musical comedia, la gran vencedora fue Los miserables, una nueva adaptación del musical tantas veces llevado al cine como a las tablas, que esta vez de la mano de Tom Hooper, el mismo que nos trajo "El discurso del rey", ahora con un presupuesto más abultado, retomó las historias de época, relatando con la mayor fidelidad posible un relato que a estas alturas, podría sonar como una apuesta a ciegas, toda vez que al haber tantas versiones, las comparaciones surgen por doquier, lo que finalmente impone una gran responsabilidad a los realizadores de traer un producto que sea innovador o de una altísima calidad, que haga que sus versiones anteriores, queden deslucidas ante las nuevas, tal como más o menos ocurre en este caso.
En cuanto a los actores, no se podría hablar de muchas sorpresas, por cuanto en las categorías principales, tanto de drama como de comedia, el plato estaba servido para cualquiera, pues en esta ocasión, la competencia estaba muy reñida, aunque no tanto en el caso de mejor actor protagónico en drama.
Daniel Day-Lewis, considerado por muchos como el mejor actor vivo, gracias no sólo a sus interpretaciones magistrales, sino a su preparación y técnica actoral, que podría decirse, raya con la perfección, en esta ocasión fue merecedor del globo de oro como mejor actor en una película dramática, galardón que para muchos es vaticinio para lo que va a suceder en la entrega de los Oscar. Protagonista de estas galas Day-Lewis se llevó el globo de oro por Lincoln, donde encarna a este presidente estadounidense, impregnándolo con su perfección, a tal punto que en algunas publicaciones tenían que aclarar que quien aparecía en la foto era el actor y no el propio presidente.

Hugh Jackman, el recordado Wolverine, quien de vez en cuando se pone serio y sale de sus papeles de acción, en esta ocasión fue merecedor del Globo gracias a su interpretación de Jean Valjean, el rol principal de la película Les Misérables, a la cual le imprimió, aparte de su fortaleza física, una calidad histriónica sin igual, donde el canto era parte fundamental de su interpretación, dando vida a una de las mejores versiones de Jean Valjean que se ha llevado a la pantalla grande.

En la parte femenina, Jessica Chastain, un personaje relativamente nuevo en el mundo del cine, pero que sin embargo, ha impuesto un toque novedoso y versatil a Hollywood, se impuso en la categoría como mejor actriz en una película dramática, gracias a su interpretación como una agente de la inteligencia estadounidense, que busca incansablemente dar con el paradero de Osama Bin Laden en la película "Zero Dark Thirty", dando así un toque intimista y hasta controversial, a uno d elo hechos que más han marcado los últimos años en este país del norte del continente americano.

Como mejor actriz en una película de comedia o musical, la galardonada fue Jennifer Lawrence, una actriz que ha temprana edad, ya ha hecho el ruido necesario en la meca del cine, para ser tenida en cuenta para todo tipo de papeles, más aún cuando a su corta, pero prolífica carrera, le añade un premio de esta categoría, el cual seguramente la catapultará como una de las actrice favoritas tanto de los directores de cine, como del público en general. Su papel en Silver Linings Playbook, película que con muchas ansias espero ver pronto en nuestro país, aparte de hacerla ver más sexy que en sus anteriores papeles, denotó que la exigencia actoral para interpretar a una mujer con desordenes mentales, como le gusta a la academia, no le quedaba grande en lo absoluto, y que por el contrario, sobrepasó este reto con todas las de la ley.

En los roles de reparto, fueron premiados dos de mis actores favoritos. Por un lado Anne Hathaway, por Les Misérables, quien impresionó, no sólo por su interpretación, sino por el cambio radical que hizo de sí misma, impresionando por una delgadez extrema y una insípida cabellera, que en esta ocasión hace lo que a muchas actrices les ha funcionado para merecer un oscar. Apeló a sacrificar su belleza por el papel. Dando notas desgarradoras a su interpretación, lo cual, muy seguramente, le traerá muchas más recompensas.

Otro de mis actores favorites y que fue aglardonado en esta ocasión, fue Christoph Waltz, quien de la mano de Quentin Tarantino, ha llegado a consagrarse como unos de los actores con mayor carácter en la meca del cine, pasando de ser uno de los villanos más odiados, y amado por mí, en "Bastardos sin Gloria", a ser el bueno la historia en "Django Desencadenado", donde pasa a ser un caza recompensas que busca justicia dentro de su forma muy singular de hacerlo.


No hay comentarios:
Publicar un comentario